Trampolín: 5 tipos diferentes para realizar actividades en casa
Los trampolines son elementos que habitualmente suelen vincularse al ocio, especialmente del público infantil. Muchos los piensan solo como complemento de una alberca inflable hacia la que zambullirse, pero esto es un error.
Los trampolines tienen muchos usos relacionados a la actividad física y contar con uno en casa puede ser algo realmente beneficioso. El problema está en el escaso conocimiento que tenemos al respecto.
A continuación, compartimos cinco tipos diferentes de trampolines para realizar actividades en la comodidad de nuestra casa.
5 tipos de trampolín
1. Trampolín fitness
Empezamos hablando de los trampolines fitness, quizás uno de los tipos más conocidos. Seguramente los habremos visto si fuimos alguna vez a un gimnasio. Se trata de pequeñas superficies elásticas donde podemos realizar diversas actividades.
El trampolín para realizar ejercicio es ideal para aquellos que impliquen equilibrio, y no necesariamente deben usarse solo para saltar. Puede complementarse esta actividad con albercas pequeñas cerca del área de trabajo para relajar los músculos al terminar.
2. Trampolín hexagonal
Este tipo es similar al mencionado en el punto anterior, solo que con la diferencia de que viene con una barra para sostenerse, lo que permite realizar otros ejercicios. De esta manera, el entrenamiento puede complejizarse y dar mejores resultados.
Es el trampolín para ejercicio ideal para quienes buscan una mayor complejidad en su rutina. A propósito, recordamos la importancia de realizar las actividades con buena técnica para evitar cualquier tipo de lesiones.
3. Trampolín con red
Este tipo de brincolín para ejercicio supone un nivel más en relación a los anteriores, fundamentalmente en relación a su tamaño y lo que este nos permitirá. Es ideal para quienes están iniciándose en el mundo de la acrobacia y necesitan mucho espacio.
La red protectora es clave para evitar caídas que puedan provocar lesiones graves que imposibiliten continuar con la práctica. Una buena idea es disponer de albercas estructurales del tipo alberca armable, para la relajación posterior al entrenamiento.
4. Trampolín abierto
Este tipo es similar al anterior, pero sin red de contención para cuidar nuestros movimientos. Esto hace que se trate de un tipo de trampolín para acróbatas profesionales, que cuentan con experiencia y saben cuidar su cuerpo.
La falta de red amplía enormemente el espectro de actividades, ejercicios y rutinas que pueden realizarse en él. Si necesitamos practicar saltos, recomendamos colocar cerca una superficie que sea capaz de recibir el impacto, como una colchoneta o una alberca inflable.
5. Trampolín para niños
Finalmente, mencionamos los trampolines para niños, que tienen la forma de uno con red pero en un tamaño reducido. Este tipo está pensado para un uso lúdico y el tipo de cuerpos de los niños, por lo que recomendamos evitar malos usos que puedan romperlos.
Pensando en que su uso está relacionado con el ocio, una excelente alternativa es construir un espacio con otros elementos de entretenimiento como albercas para niños del tipo alberca inflable.
Con este repaso, no quedarán dudas de los tipos de trampolines que existen. Contando con esa información, será muy sencillo elegir el que mejor se adapte a nuestras necesidades.